Bonsái cerezo silvestre - prunus avium: Cuidados y mantenimiento

El prunus avium conocido popualrmente como cerezo silvestre, cerezo, guindo zorrero, maroviña y guereciga es un árbol caduco de la familia de las rosáceas.

Es originario de Europa, Asia Menor y norte de África y cultivado en el suelo puede llegar a alcanzar hasta los 30 metros de altura.

Sus hojas de tamaño grande, son de color verde, ovaladas y finamente dentadas.

Florece a finales de invierno antes de que broten sus hojas en primavera.

Se cultiva como bonsái por su espectacular floración y su fruto (cereza).

Situación y temperaturas

Debemos cultivarlo todo el año en exterior a pleno sol para que florezca correctamente.

No precisa protección frente al sol directo aunque los meses más calurosos debemos controlar el riego y si nos preocupa podemos protegerlo en las horas más duras para evitar que estas se dañen.

Aguanta heladas aunque lo protegeremos de estas si ya ha florecido.

Riego

Resiste bien las sequías. Regaremos de forma moderada. En condiciones naturales sobrevive con muy poca agua.

Abonado

Abonaremos en primavera tras la floración antes de que comience a brotar el verde.

Sustrato recomendado

Para garantizar un buen drenaje recomendamos utilizar akadama y kiryuzuna en una proporción de 70/30.

Trasplante

Trasplantaremos a principios de primavera antes de la brotación. Los cerezos silvestres permiten la poda radical de raíces y el lavado del cepellón.

Cada cuanto tiempo trasplantar prunus avium

Trasplantaremos cada dos años.

Trabajos de diseño

Podemos alambrar en los meses de primavera y verano. Sus ramas crecen con rapidez por lo que vigilaremos que no se clave el alambre para que no dañe el árbol.

Podaremos cuando haya pasado la floración ya que si lo hacemos en invierno eliminaríamos la floración de ese año que sale justo al finalizar esa estación.

Pinzaremos los brotes a finales del verano cuando las ramas se alarguen para mantener la silueta.

 

Multiplicación

Se puede multiplicar por semillas que germinan con gran facilidad. También se reproduce en menor medida por esquejes. Admite injertos por aproximación.

Plagas y enfermedades

Al ser un frutal puede sufrir ataques de cochinillas, pulgones, orugas, y arañas rojas. También es propenso a hongos y enfermedades como oidio, roya, cribado ("perdigonada") y gomosis.

Es recomendable usar pasta selladora y fungicida en los cortes de las podas para protegerlo.